En un paso trascendental hacia la preservación de la estabilidad y el orden constitucional, diversos candidatos a la Presidencia del Estado Plurinacional de Bolivia para las elecciones generales de 2025 han suscrito el “Acuerdo por el Bien Común de Bolivia”. Este compromiso público busca asegurar la democracia, la legalidad y la paz social en un contexto de compleja situación institucional, económica y social que atraviesa el país.
Los firmantes del acuerdo, conscientes de la responsabilidad histórica, se han comprometido públicamente a una serie de puntos fundamentales:
* Defensa del Orden Constitucional: Garantizar la independencia de los órganos del Estado, el pluralismo político, el sufragio libre y los derechos fundamentales consagrados en la Constitución Política del Estado.
* Elecciones 2025 como Única Salida Pacífica: Considerar las próximas elecciones como la única vía democrática para superar la crisis, exigiendo un desarrollo transparente, sin interferencias judiciales, con acceso equitativo y supervisión nacional e internacional efectiva.
* Preservación de la Paz Social: Rechazar toda forma de violencia, intimidación o coacción política, incluyendo bloqueos y amenazas que intenten alterar el proceso electoral.
* Rechazo a la Subversión Constitucional: Oponerse a cualquier intento de alterar la sucesión legal de autoridades o desconocer los principios del Estado de Derecho.
* Reunión Urgente con el TSE: Instar al Tribunal Supremo Electoral a convocar a todos los Órganos del Estado y Candidatos Presidenciales para reafirmar la convocatoria a elecciones y la vigencia del Estado Democrático de Derecho.
* Aprobación de Créditos Esenciales: Exhortar a la Asamblea Legislativa a agilizar la aprobación de créditos para garantizar la importación de bienes de primera necesidad.
* Reconstrucción Institucional Post-Electoral: Asegurar, en caso de ser electos, un amplio proceso de reconstrucción institucional para restaurar el Estado de derecho, reformar el sistema judicial, garantizar la seguridad jurídica y reencauzar el desarrollo nacional en un marco de libertad y legalidad.
Los firmantes han expresado su plena disposición a contribuir, desde sus respectivos espacios políticos, a la estabilidad mínima necesaria para garantizar la paz social y la continuidad institucional. Se comprometen a ejercer la crítica con responsabilidad, diferenciando el legítimo debate democrático de cualquier llamado a la ruptura institucional o al uso de la violencia. Asimismo, hacen un llamado a la población a abandonar toda postura de violencia y confrontación, enfatizando que la Democracia es la única vía pacífica para solucionar los problemas nacionales.
De igual manera, se exhorta al gobierno actual a actuar con responsabilidad, adoptando medidas inmediatas para asegurar el abastecimiento de bienes esenciales, proteger el aparato productivo, evitar bloqueos y preservar la estabilidad fiscal y financiera durante el proceso electoral y la transición.
Este acuerdo, si bien no representa una adhesión ideológica o programática entre los suscriptores, simboliza una manifestación de responsabilidad democrática y un compromiso inquebrantable con la Patria, en un momento crucial en el que Bolivia no puede permitirse más incertidumbres ni aventuras personales.
El “Acuerdo por el Bien Común de Bolivia” marca un hito en la política boliviana, demostrando la voluntad de los líderes de anteponer el interés nacional y la estabilidad democrática.
